3.
Limita la humedad y combate los ácaros
El 65 % de los europeos secan la ropa en el interior de casa al menos una vez a la semana, y esta es una mala costumbre. La ropa desprende humedad al secarse, lo que puede generar moho y humedad nocivos en la casa, así que intenta secarla en otra parte si es posible. Por el mismo motivo, asegúrate de ventilar bien el baño. Además, a los ácaros les encantan las camas, así que cambia las sábanas con frecuencia. Piensa también en cambiar los colchones y las almohadas si hace mucho tiempo que los tienes. Un colchón usado normal puede tener entre 100 000 y 10 millones de ácaros en su interior, y el 10 % del peso de una almohada con dos años de antigüedad puede deberse a los ácaros muertos y sus restos.